Tendencias en sostenibilidad para infraestructura: lecciones para Colombia y avances globales

Tendencias29-10-2024

Ante la urgencia y necesidad de combatir el cambio climático y promover un desarrollo económico inclusivo, la sostenibilidad ha pasado de ser un simple concepto aspiracional a un pilar esencial en la planificación y ejecución de proyectos de infraestructura.  

Países como Colombia, con un gran potencial de crecimiento y desarrollo, están cada vez más comprometidos con adoptar prácticas sostenibles. Sin embargo, las lecciones de grandes potencias y los avances en tecnología, materiales y técnicas son fundamentales para acelerar este proceso y garantizar que los proyectos de infraestructura no solo cumplan con los requisitos actuales, sino que sean resilientes a los retos del futuro.

Por ello, es clave conocer algunas de las principales tendencias en sostenibilidad para proyectos de infraestructura, los avances que han marcado la pauta en el escenario global y cómo Colombia puede beneficiarse de estos aprendizajes, destacando las claves para su implementación exitosa en el contexto local

Infraestructura verde: la integración de la naturaleza en las soluciones 

La infraestructura verde se ha consolidado como una de las principales tendencias en sostenibilidad en proyectos para el sector. Este concepto busca integrar la naturaleza en el diseño y construcción de proyectos, promoviendo la creación de espacios que reduzcan el impacto ambiental y que, además, contribuyan a mejorar la biodiversidad y la calidad de vida de las comunidades.

Las soluciones basadas en la naturaleza incluyen desde la instalación de techos y paredes verdes hasta la creación de parques urbanos y la restauración de ecosistemas naturales adyacentes a proyectos de gran envergadura.

En países como Colombia, con una biodiversidad excepcional, este enfoque es particularmente relevante. Las ciudades pueden aprender de ejemplos como Singapur, reconocida mundialmente por su enfoque en infraestructuras verdes que integran jardines verticales, espacios públicos y techos verdes en sus proyectos.

De manera similar, ciudades colombianas como Medellín han comenzado a implementar iniciativas de corredores verdes, reduciendo la contaminación y creando microclimas que mejoran la calidad del aire. Este tipo de proyectos no solo embellecen el entorno urbano, sino que también ayudan a combatir problemas derivados del cambio climático.

En este sentido, Colombia puede replicar las estrategias implementadas por grandes potencias, adaptándolas a su rica biodiversidad y aprovechando su capital natural para diseñar proyectos sostenibles.

Algunos proyectos como Parques del Río en Medellín, Ciudad Mallorquín en Barranquilla o la renovación del centro de Cali prometen continuar con los conceptos de urbanismo sostenible y la expansión de corredores verdes que ayuden a mitigar los efectos de las olas de calor y mejoren la conectividad ecológica en ciudades densamente pobladas.

Materiales de construcción sostenibles 

Uno de los grandes retos en la construcción de infraestructura sostenible es el uso de materiales que minimicen la huella de carbono. Tradicionalmente, materiales como el cemento y el acero han sido ampliamente utilizados, pero estos generan grandes cantidades de CO₂ en su proceso de producción.

Por eso, la innovación en materiales de construcción sostenibles ha ganado protagonismo, con alternativas como el concreto y el cemento verde, que utiliza residuos industriales reciclados, o la madera laminada cruzada (CLT), un material que está revolucionando el sector de la construcción en países nórdicos.

Un caso ejemplar es Noruega, donde la construcción de rascacielos de madera ha demostrado que es posible crear infraestructuras resistentes, sostenibles y estéticamente atractivas sin recurrir a materiales tradicionales de alto impacto ambiental.

En Colombia, donde las construcciones de gran altura son cada vez más comunes en ciudades como Bogotá, Medellín, Cali y Barranquilla, existe un enorme potencial para adoptar este tipo de innovaciones, especialmente en áreas rurales, donde el uso de madera de origen responsable podría generar empleo y promover la economía local. 

Además, las viviendas certificadas con materiales sostenibles lograrían un ahorro de 48,4 millones de metros cúbicos de agua, 576.000 toneladas de CO₂ y una cifra estimada de $485.000 millones inferior en el pago de servicios públicos.

Por esta razón, es necesario fomentar normativas que promuevan el uso de materiales sostenibles y que ofrezcan incentivos para la adopción de nuevas tecnologías constructivas, apunta Camacol.

Energía renovable como pilar de la infraestructura 

La transición energética hacia fuentes renovables es uno de los pilares más importantes de la sostenibilidad en infraestructura. Ya no se trata solo de construir edificios o carreteras más eficientes desde el punto de vista energético, sino de garantizar que todo el ciclo de vida del proyecto, desde su concepción hasta su operación, esté alimentado por fuentes limpias. Europa ha liderado esta transición, con países como Dinamarca y Alemania apostando fuertemente por la energía eólica y solar en sus proyectos de infraestructura.

En Colombia, el potencial para la integración de energías renovables es vasto, especialmente en el campo de la energía solar y eólica. Zonas como la Guajira han sido identificadas como claves para el desarrollo de parques eólicos de gran escala, mientras que los Andes ofrecen excelentes condiciones para la energía solar.  

Economía circular en proyectos de infraestructura

El concepto de economía circular también está transformando la manera en que se diseñan y gestionan los proyectos de infraestructura. Esta propone un modelo en el que los materiales y recursos se mantengan en uso el mayor tiempo posible, reduciendo la generación de residuos y promoviendo el reciclaje y la reutilización.

En el ámbito de la infraestructura, esto implica desde el uso de materiales reciclados en la construcción hasta la planificación de sistemas de gestión de residuos eficientes durante la vida útil de la obra.

En Países Bajos, por ejemplo, el modelo de economía circular ya se ha implementado en la construcción de carreteras, donde se emplean materiales reciclados provenientes de otras infraestructuras en desuso.

En Colombia, este enfoque tiene un gran potencial, especialmente en el sector de la construcción de carreteras y puentes, donde el uso de materiales reciclados podría no solo reducir costos, sino también minimizar el impacto ambiental.

Infraestructura resiliente frente al cambio climático 

Uno de los desafíos más importantes para los proyectos de infraestructura es garantizar que sean resilientes ante los efectos del cambio climático. Inundaciones, huracanes y fenómenos climáticos extremos están afectando cada vez más a las infraestructuras a nivel mundial, lo que ha llevado a una reevaluación de las normativas y diseños tradicionales.

Japón, por ejemplo, ha desarrollado avanzados sistemas de infraestructura resiliente, diseñados para soportar terremotos y tsunamis, mientras que, en los Países Bajos, los proyectos de gestión del agua han sido fundamentales para proteger al país de las inundaciones.

En Colombia, la resiliencia ante el cambio climático es especialmente importante, dado que muchas zonas del país son propensas a desastres naturales como inundaciones y deslizamientos de tierra. Incorporar principios de diseño resiliente en proyectos de infraestructura, especialmente en áreas vulnerables, es clave para garantizar la sostenibilidad a largo plazo.

Por esto, es necesario desarrollar infraestructuras que puedan resistir las crecientes amenazas del cambio climático, especialmente en zonas propensas a desastres como las áreas costeras o montañosas y aprovechar tecnologías de modelado climático y predicción de desastres para diseñar proyectos más seguros y resilientes.

Conclusiones para un camino hacia la sostenibilidad en infraestructura

• Para países como Colombia, la adopción de tendencias globales en sostenibilidad para proyectos de infraestructura es crucial para alcanzar sus metas de desarrollo y combatir los efectos del cambio climático.
• La integración de infraestructura verde, el uso de materiales sostenibles, la transición hacia energías renovables, la adopción de la economía circular y el diseño de infraestructuras resilientes no son solo una opción, sino una necesidad para garantizar el bienestar de las generaciones futuras.
• Sin embargo, el éxito de estos esfuerzos dependerá de una planificación cuidadosa, de la creación de alianzas estratégicas entre los sectores público y privado, y de un compromiso firme por parte de los tomadores de decisiones. Al aprender de las grandes potencias y adaptar las soluciones a su contexto local, Colombia tiene la oportunidad de convertirse en un referente regional en infraestructura sostenible.

5 claves para integrar la sostenibilidad en proyectos de infraestructura 

La infraestructura sostenible está cobrando protagonismo en Colombia, alineando el desarrollo urbano con la protección del medio ambiente y la economía local. Con esto, se busca reducir la huella ambiental, mejorar la calidad de vida y garantizar la resiliencia de las infraestructuras ante los desafíos del futuro. Estas son cinco claves para desarrollar proyectos de infraestructura sostenible: 

1. Integración de la naturaleza en infraestructuras
2. Uso de materiales sostenibles en la construcción
3. Impulso de las energías renovables en infraestructura
4. Economía circular en infraestructura
5. Resiliencia ante el cambio climático

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